GALERIA ESART (Barcelona)
XV SALÓN DE INVIERNO-2014: EL ACADEMICISMO SE IMPONE
El pasado 17 de enero, la Galeria Esart de Barcelona inauguró la segunda convocatoria del XV Salón de Invierno. La primera tuvo lugar el día 3 de enero, y entre ambas, se ha logrado reunir la presencia de 140 artistas, que como en toda colectiva, exhiben un variado y extenso catálogo de estilos y temáticas.
La presente edición, ha contado también con la colaboración de la Fundació Privada Maria Pintarelli, de Barcelona, a cuyo criterio se han valorado las obras, y serán otorgados diversos primeros en cuantía y categoría.
Como toda exposición colectiva de una galería, el paso del tiempo permite consolidar el prestigio para la sala de arte, y el permanecer a la expectativa en la evolución de los distintos artistas, de sus obras, y sobre todo de su exploración en el mundo artístico, ya que la solera de los quince años de esta sala de arte, convierten al Salón en una especial generación social y cultural, ya que los periodos generacionales se miden en esta cifra.
En esta segunda convocatoria, abunda el academicismo a través de la figuración, el paisaje natural y urbano, las marinas y algunos bodegones, siendo escasa la abstracción, aunque muy notable. En conjunto puede decirse que es una muestra de calidad respetable, con obras muy elaboradas, corrección en las composiciones, y con un sentido altamente decorativo. Desde la edición 2013, va perfilándose en el Salón un importante incremento en la calidad de los trabajos presentados, que si bien no muestran ímpetu y genialidad, si puede verse un trabajo elaborado, con excelente factura, y realizado con amor al arte.
Un XV Salón de Invierno que exhibe en forma de exposición única, pero de variedad absoluta, un momento artístico, efímero en el tiempo, pero continuo en la memoria, una tarea individual, con deseo de reencuentro. Un instante de inspiración, para mostrar a todos la personal e intransferible esencia de ser artista.
ESART Galería
C/ Diputació, 188
Barcelona
SALA PARÉS (Barcelona)
Exposición de PINTURA CATALANA – Siglos XIX-XX
Cómo viene siendo tradicional en esta conocida galería de arte barcelonesa, desde mediados de diciembre de 2013, con motivo de las fiestas de Navidad, y hasta finales de este mes de enero, el público visitante ha podido contemplar una interesante, y por supuesto comercial muestra de pintura catalana de finales del XIX, hasta la tercera década del siglo XX, mayoritariamente, aunque con algunas piezas fuera de este periodo.
Un conjunto artístico notable, con grandes nombres de la pintura catalana: Ricard Opisso, Ramon Casas, Joaquim Mir, Santiago Rusiñol Olga Sacharoff, Ignasi Mundó, Rafael Durancamps, Mallol Suazo, etc., y cuantos interesantes y siempre llenos de nostálgica calidez Josep Amat, un artista cuya obra se ha integrado con naturalidad inusual en los gustos, las preferencias y las inclinaciones estéticas de un determinado sector del público catalán y del coleccionismo – es sabido por muchos la especial debilidad de Carmen Thyssen por este pintor, del que posee un cuerpo compacto de obras escogidas, que oscilan entre el 1927 y el 1984 – aunque las obras presentadas por la Parés presentan el acierto, la exquisitez de criterio y el sentido crítico que representan parte del ámbito global del arte catalán.
Por supuesto, merece destacarse el magnífico: Clarasó en su taller, obra de Santiago Rusiñol, que como emblema de esta exposición, la galeria colocó de frente a la puerta de entrada para que, invitando de esta forma al paseante a entrar en la misma.
Una obra que ha sido exhibida en varias exposiciones, e incluso en 1993 fue subastada por la firma Brok. Una espectacular pieza de 175 x 114 cm, realizada con un profundo conocimiento de la perspectiva, - a pesar que la vista se centra en el escultor, Rusiñol con su característico sentido del humor no pudo evitar retratar también lo que ocurría en la venta de enfrente - meticulosidad y cuidado en los detalles, radiante luminosidad en perfecto equilibro con la sobriedad de la gama cromática. Una composición y estructura perfectas, en un merecido homenaje al escultor Enric Clarasó, de quien también se presenta una escultura titulada Eva y realizada en escayola pintada.
Interesante también destacar el Tablao flamenco de Ricard Canals, una obra costumbrista, llena de vida y movimiento, realizada en la técnica del pastel, como clara imagen de la afición del público barcelonés por el flamenco que, al igual que los toros, tenía grandes incondicionales.
Un Manola discreta y elegante de Ramon Casas, realizada en pastel y carboncillo sobre papel, un siempre distinguido Ricard Opisso con su singular y etérea visión sobre un Baile de Salón en París, y una lírica y amable visión idealizada de Olga Sacharoff. Subrayar también el intimismo y la brillantez de un sugerente bodegón de Josep Roca Sastre: Tazas, óleo sobre tela de 81x65cm.
En conjunto, una exposición con obra muy bien seleccionada, sin descartar un marcado ánimo de venta, -en este aspecto, es necesario hacer incidencia en el excelente enmarcado de algunas piezas – cuya contemplación debe realizarse bajo el prisma de la historia, la adquisición de conocimiento, y de un desarrollo didáctico, y que demuestra una vez más entre finales del siglo XIX y hasta 1930, el panorama artístico catalán era verdaderamente un hervidero de imaginación y creatividad.
SALA PARÉS
C/ Petritxol, 5
Barcelona
GALERIA TRAMA (Sala Parés) – Barcelona
PERICO PASTOR: UN FUAVISMO SIN SORPRESAS
La Galeria Trama, situada en el piso superior de la Sala Parés, ofreció hasta el pasado 20 de enero, una muestra dedicada a Perico Pastor, bajo el título “Déjà Vu”
En su tercera exposición individual, pudo contemplarse una obra mayoritariamente de gran formato, con paleta básicamente de cuatro colores, con predominio de los tonos anaranjados y amarillentos, y donde se presentaba una obra con referencias fauvistas, tanto a nivel técnico como estético, pero bajo un concepto más actual e indefinido, gracias a una figuración de trazo negro vehemente y marcado.
El relato temático de la muestra puede definirse como historias cotidianas, sin que llamen demasiado la atención del espectador, que si bien contempla una obra vistosa y llamativa, tal como indica el título de la exposición, “ya está vista”.
Una muestra a la que le falta la naturalidad, espontaneidad y pasión. Su lenguaje cromático no expresa ningún tipo de sentimiento, ni tan siquiera realza el color en sí mismo. Todo es estático e impertérrito.
Una muestra a la que le falta la naturalidad, espontaneidad y pasión. Su lenguaje cromático no expresa ningún tipo de sentimiento, ni tan siquiera realza el color en sí mismo. Todo es estático e impertérrito.
Un conjunto expositivo donde la construcción con el color y la simplificación formal, a pesar de dominar las obras, le falta audacia y seguridad. Si bien Pastor dibuja con el color, y lo envuelve con el gesto y el trazo, desempeñando el papel de dibujo, a la vez que da sombra de volúmenes, le falta alegría y profundidad.
GALERIA TRAMA
C/ Petritxol, 5
Barcelona
SALA DALMAU (Barcelona)
MANOLO BELZUNCE: ICONOGRAFÍA A TRAVÉS DEL COLLAGE
Hay ocasiones en que una exposición deja sensaciones difíciles de describir, pero ninguna de ellas es la indiferencia, sea por su atracción visual o por la simbología que entraña su planteamiento estético, que el espectador puede rechazar o aceptar, más por su estado anímico que por sus gustos.
Sala Dalmau presenta hasta finales de mes: MANOLO BELZUNCE, Aproximació a l’obra de Delacroix “Dones d’Alger a la seva cambra” (Aproximación a la obra de Delacroix – Mujeres de Argel en su habitación), una muestra donde a través del collage, el artista hace una amplia divagación sobre la obra una parte muy concreta de Delacroix: Oriente Medio.
En la composición de sus obras puede observarse revistas o telas viejas, que sirven de complemento o de relleno, y donde un trazo fluido y vehemente presenta una narración, donde afloraran todo tipo de sensaciones, sugerencias, furor y dudas… pasiones ocultas.
Belzunce trabaja exclusivamente con el collage, lo que le permite incorporar elementos palpables a la obra, a la vez que realiza una composición en base a una estética llamativa y vitalista, plasmando una especial iconografía, plagada de símbolos y mensajes.
La utilización de los distintos materiales se vincula con una imagen preconcebida – en este caso de las obras de Delacroix – que el artista transforma en una creación de vanguardia, que evidentemente desvirtúa en su totalidad la obra del genio francés, reinventando sus obras, al igual que Picasso realizase con su crítica y singular visión de las Meninas de Velázquez.
Tal como Francesc Miralles indicó en el catálogo de la exposición: Diálogos con Matisse, (parece que el artista se inspira en los últimos tiempos en los grandes de las Vanguardias del siglo XX), organizada por la Galeria Bambara de Cartagena: Belzunce va y viene por la historia de las técnicas según precisa en cada obra: del collage pasa al grueso matérico, del color y de la mancha pasa a la línea y al dibujo, de lo insinuado va a lo minuciosamente descrito.
Pero no importan las técnicas. En este artista se impone, por encima de todo, el vitalismo existencial que le conduce de una a otra parte como la vida y sus altibajos nos conduce a todos. De Manolo Belzunce aquello que más me sugestiona es este no saber nunca que va a surgir en su obra y, a la vez, tener la certeza de hallar siempre un hálito de humanidad.
En la presente exposición, sin duda el artista expresa una búsqueda desesperada de una ética y estética, difícil de distinguir para los habituales que visitamos esta sala, ya que una exposición no se diferencia de la otra.
SALA DALMAU
C/Consell de Cent, 349
Barcelona